El quinto mejor equipo de Aragón (catorce temporadas en Segunda B, cuarenta y tres en Tercera División, cuatro en Preferente y tres en Primera Regional) cierra, a fecha de hoy, la tabla clasificatoria de la Preferente y corre serio peligro de perder la categoría al término de la liga.
Esta es una buena muestra de las contradicciones que el mundo competitivo del fútbol ofrece en algunas ocasiones, pero que ahora puede servirle al conjunto caspolino para volver a la senda del triunfo y seguir confiando en las propias fuerzas. Siempre, como es lógico, no dando por hecho lo no acontecido.
Las opciones de las dos plantillas que se enfrentan este domingo en el Juan Antonio Endeiza a partir de las cuatro y media de la tarde no pueden ser más dispares. El conjunto andorrano solo ha sacado siete puntos en casa y el caspolino ha logrado más en sus viajes que los acumulados ante sus aficionados y son muchos.
Si a la historia volvemos para terminar, las cifras son aplastantes. De los dieciocho partidos disputados entre el CF.Andorra (en sus diferentes versiones) y el CD.Caspe, dieciséis han favorecido a los locales; uno concluyó en empate (cero-cero, temporada 50/15) y otro, el jugado el año pasado, fue victoria caspolina por uno a dos, con goles de Puyo y Gallego para los visitantes.